Aunque no es posible descubrir todo de Barcelona en un día, se puede conocer el ambiente extraordinario de esta ciudad tan maravillosa. Para empezar el día puedes desayunar en uno de los bares pequeños que hay en Barcelona. Disfruta de tu primer café con leche y un croissant o una napolitana y después comienza el tour por Barcelona en 24 horas.
Desde mi punto de vista, no se puede imaginar Barcelona sin su arquitecto más conocido Antoni Gaudí, por lo cual se tiene que visitar sus obras, que están repartidas por la ciudad. Empieza con el Park Güell y descubre los colores diferentes, los mosaicos y los detalles escondidos por ejemplo en el techo. Sientáte en los bancos de piedra y disfruta de la vista hermosa de la ciudad y del mar. No puedes perder hacer una foto con el famoso dragón debajo de los bancos.
En efecto, el Park Güell es impresionante, pero la obra más impresionante de Gaudí es la Sagrada Familia. ¡Es de visita obligada! Coge el autobús o el metro y contempla esta iglesia gigante con sus dos fachadas – la nueva y la antigua – y con sus varias torres. ¡No es necesario que entres, solamente da una vuelta al aire libre!
Por supuesto que la Sagrada Familia es uno de los monumentos característicos de Barcelona, lo que es absolutamente imprescindible es la Rambla y el Barrio Gótico, que es el barrio más antiguo de la ciudad, así como el centro. De camino al centro se puede comer un bocadillo en un bar, por ejemplo con jamón serrano, fuet o manchego. Lo que también es imprescindible es perderse en las calles estrechas del Barrio Gótico con tiendas originales y escondidas y los monumentos románicos. Tampoco te puedes perder pasear por la Rambla hasta el puerto de Barcelona. ¡No olvides la Plaça Reial cerca de la Rambla! Adémas, no dejes de tomar churros con chocolate en algún momento del día, lo mejor en la churreria en la Via Laietana 46, que tiene un ambiente muy auténtico.
Claro, en España uno no se puede perder las tapas. No dejes de comer Pa amb tomàquet, el típico plato de Catalunya. Te recomiendo el restaurante Onofre en el Carrer de les Magdalenes. Pero por supuesto, en Barcelona hay un mónton de restaurantes donde se pueden comer tapas. Por ejemplo en el Passeig de Gracia, donde están las dos últimas obras de Gaudí que se tienen que visitar – la Casa Milà y la Casa Battló. Por la noche estos dos edificios están iluminados. ¡Qué hermoso! Si queda tiempo por la noche, te recomiendo ver la Fuente Mágica cerca de la Plaza España. Hay un espectáculo con agua, luz y música. ¡Vale la pena!
Espero que despúes de este día especial en Barcelona tengas una buena impresión de la ciudad. ¡Seguramente vas a querer volver!
Una descripción muy buena de lo que es imprescindible en Barcelona. Cómo tú me encanta el Barrio Gótico y por supuesto uno no se puede perder comer churros. Gracias por la recomendación de la churreria en Via Laitana. Me gustaría visitarla un día.
ResponderEliminarMe encantan los churros también. De hecho, hoy fui a comer churros con unas amigas. Fuimos a un café en el Carrer dels Comtes, al lado de la Catedral de Barcelona. No me acuerdo del nombre, pero ahí también tenían churros riquísimos. Pero seguro que voy a probar la churrería en Via Laietana muy pronto. ¡Deberíamos ir juntas! :)
ResponderEliminar¡Qué sí, vamos juntas! Tenemos todo el verano para comerlos ;)
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