Con la entrada del buen tiempo, la imagen de Barcelona cambia notablemente. En las calles hay un montón de gente, sobre todo en la Rambla. Subir por el Paseo de Gracia lleva más tiempo y el metro siempre está a tope. El verano acaba de llegar a la ciudad y esto se nota en el número de turistas. Por supuesto, en una ciudad como Barcelona siempre hay muchos turistas, pero no tantos como en esta época. Claro, en el verano la ciudad es aún más maravillosa, puesto que hace buen tiempo y se puede disfrutar de la playa, además de las visitas obligadas como el Parc Güell.
A mí, como habitante temporal, a veces me molesta que haya tantos turistas. Ahora en el Parc Güell no puedo disfrutar del ambiente o de los hermosos colores tan tranquilamente como antes, en invierno. Si observamos esta foto del dragón de Gaudí, seguramente es difícil imaginar que hace tres meses no había casi nadie en el parque. No había cola delante de la famosa escultura, te podías sentar en los bancos sin problemas y hacer fotos casi sin gente. Además, ahora se tiene que ir con cuidado con los ladrones, más que antes. ¡Qué pena!
Sin embargo, vuelvo al Parc Güell, o sea sola o con amigos y visitas de Alemania, porque me he enamorado de esta obra tremendamente especial de Gaudí. Además, he encontrado una distracción: reírse de la gente que quiere sacarse una foto al lado del dragón, porque se tiene que esperar unos minutos y al final hay 20 personas más en la foto :-) Aunque me parece divertido, lo entiendo. ¡Es verdad que sacar esta foto es absolutamente imprescindible!
¿POr qué no pones la foto? Es muy impactante
ResponderEliminarJajaja - sacar esta foto es absolutamente imprescindible. Tienes una foto de tú y el dragón? También cómo tú, estoy hasta las narices de tantos turistas - en mi opinión es demasiado, pero también entiendo porque los turistas quieren venir a Barcelona. Pero no podrían venir en julio o augusto cuando yo he ido a Dinamarca???? ;-)
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